Hace un tiempo hicimos un artículo sobre la franquicia de Romance of The Three Kingdoms, precisamente usando el 8 original como base, así que aprovechando que hace nada salió el Remake vamos a hablar un poco de este. Y a revivir la historia de uno de los personajes más importantes de los tres reinos. Así que hoy, en Jugando con la Historia y de la mano de Koei, vamos a jugar con la historia de Cao Cao en el ROTK 8 Remake.
La importancia de los preparativos
Primero seamos eficientes y preparémonos. Aquí tenéis un análisis del juego en sí, hecho por nuestra compañera Rulernakano, con él que os podéis hacer una idea general del estilo de juego que es. Por supuesto, como Rulernakano nota en su análisis, Romance of The Three Kingdoms 8 Remake puede llegar a ser un juego con mucha información por procesar. Aún más si uno no está tan familiarizado con el contexto del juego.
En cuanto al contexto histórico del juego en sí, ya sabéis. El juego, al igual que el original, está basando en la novela de Romance de los Tres Reinos escrito por Luo Guanzhong. Aunque la novela explica el periodo entre la caída de la dinastía Han hasta la fundación de la dinastía Jin, es importante destacar que se toma sus licencias, y por lo tanto, así hace el juego.
El inicio de su carrera militar
En el anterior artículo hablemos de la caída del imperio Han, y en el artículo sobre el Wo Long Fallen Dynasty (que usa el mismo contexto histórico) sobre la subida al poder de Dong Zhuo. Y es que esa fue una época turbulenta, donde no solo miles de vidas se perdieron, sino que multitud de personas se hicieron un nombre, ya sea por fama o infamia. Como ya dejemos caer en nuestro anterior artículo, una de estas personas fue Cao Cao.
De joven quizá fue un chaval dado a la indulgencia y la autocomplacencia junto a su amigo Yuan Shao, pero lo que era innegable es que ya mostraba una mente brillante. Había un hombre llamado Xu Shao del que se decía que tenía talento para evaluar a la gente, Cao Cao fue a hacerle una visita para que le evaluara con la esperanza de ganar fama política con ella. Después de mucha insistencia, Xu Shao le dijo: «Serás un ministro capaz en tiempos de paz, y un héroe sin escrúpulos en tiempos de caos». Se lo tomó eso como un cumplido y se marchó riendo.
Al cumplir los 20 años, recibió su primer puesto oficial como capitán del distrito de LuoYang, donde dio órdenes de apresar y tratar por igual a todo el que violara la ley, independientemente de su estatus. Esta política no fue demasiado popular, lo que hizo que lo «ascendieran» a gobernador de Dunqiu, lejos de la LuoYang.
La rebelión de los turbantes amarillos, y el ascenso de Dong Zhuo
Como sabréis, la Rebelión de los Turbantes Amarillos estalló. Y con ello, diversos señores y guerreros de todo tipo se alzaron a combatirlos. A Cao Cao se le llamó para hacerle Capitán de la Caballería, y ayudar al gobierno a repeler la rebelión. Tuvo grandes éxitos en ese puesto, lo que les llevo a ascenderlo a gobernador de la comandancia de Dong.
Aunque la rebelión fue derrotada, Dong Zhuo uso el caos en su beneficio, logrando poner en el trono un Emperador de su propia elección, dándole el poder a efectos prácticos. Cao Cao abandonó la capital y se dirigió a Chenliu, donde empezó a reunir su propio ejército. El año siguiente, se unió junto con otros gobernadores de otras regiones en una coalición liderada por su antiguo amigo Yuan Shao, con el fin de derrotar a Dong Zhuo.
De títulos va la cosa
Una vez más, y como sabréis del artículo sobre Wo Long, al final fue Lu Bu quien traiciono y mato a Dong Zhuo en 192, y que luego se vio obligado a huir. 4 años más tarde, Cao Cao encontró al Emperador al que convenció de mover la capital a Xuchang. También recibió el título de Canciller, Gran General y Marqués de Wuping aunque estos dos últimos títulos carecían de ningún valor práctico. Pese a que los propios consejeros le recomendaban aprovechar y usurpar al Emperador, se negó.
Durante este tiempo, Yuan Shao había ido creciendo en poder hasta convertirse en el gobernante mas poderoso de China. Para mantener una relación amistosa con él, Cao Cao le ofreció el título de Asesor Jefe. Irónicamente, eso solo empeoro la antigua amistad entre los dos, sintiéndose insultado por la oferta. Logró calmar un poco las aguas ofreciéndole su propio título y tomando él el de Asesor Jefe, aunque lamentablemente la cosa fue a peor.
La batalla de Guan Du
En el año 200, Yuan Shao reunió un ejército de 100.000 tropas para tomar Xuchang, bajo el pretexto de rescatar al emperador. Por su parte, Cao Cao puso 20.000 tropas en Guan Du para frenar su avance. Pese a la diferencia numérica, la batalla se mantenía en empate: Cao Cao carecía de los hombres necesarios para poder avanzar, mientras que el orgullo de Yuan Shao le hacía atacar al ejército enemigo de frente, permitiendo a Cao Cao defenderse de sus ataques.
Para deshacer el empate y por consejo de Liu Bei (que estaba de refuerzo en su ejército) le aconsejo a Yuan Shao de aprovechar sus conexiones con algunos de los oficiales del bando contrario para causar sublevaciones. El plan al principio funciono, pero Cao Cao rápidamente pudo cancelarlo gracias a las dotes diplomáticas de Man Chong, persona que había puesto de oficial en esta batalla precisamente para ese propósito.
Lo que finalmente rompió el equilibrio entre las dos fuerzas fue la traición de Xu You al ejército de Yuan Shao. Explicó a Cao Cao donde tenía Yuan Shao las provisiones para el ejército y este rápidamente montó una unidad de elite a la que mandó para quemar esas provisiones. El plan funcionó, y Yuan Shao se vio obligado a retroceder.
Los tres reinos
Yuan Shao murió poco después de la derrota de Guan Du y su reino paso a manos de sus dos hijos. Las disputas entre los dos hermanos los convirtieron en un blanco fácil, y Cao Cao pudo rápidamente encargarse de ellos. Con ello, obtuvo el control efectivo de todo el norte de China. Habiendo logrado ello, aún quedaba conquistar el resto de China. Con ese objetivo, empezó a movilizarse hacia el sur. Al principio disfruto del éxito cuando el Gobernante de Jing Zhou murió y su hijo, Liu Zong se rindió ante él sin oponer resistencia ninguna. Sin embargo, el no era el único que había ido creciendo en poder. Pese al consejo de sus consejeros, siguió adelante solo para ser parado en seco por la alianza entre Liu Bei y Sun Quan y fue derrotado en la Batalla de Chi Bi.
Tras esa derrota, Cao Cao se centró en consolidar su poder en los territorios que ya poseía. En 213 obtuvo el título de Duque de Wei, y más adelante fue ascendido a Principe/Rey de Wei. Por su parte, tanto Liu Bei como Sun Quan acabaron fundando sus propios reinos, Shu y Wu respectivamente, dividiendo China entre esos tres reinos (de ahí el nombre tanto de la novela como de los juegos). Y aunque tuvieron batallas entre ellos durante los años siguientes, ninguno de los tres reinos lograría ningún avance relevante durante un tiempo.
En 220, murió con 65 años. Tal y como puso en su última voluntad, fue enterrado con su ropa de día y todos los que estaban en las fronteras se vieron obligados a continuar ahí en lugar de ir al entierro, pues «el país aún estaba desestabilizado». Su hijo mayor, Cao Pi, tomo el mando del reino.