El editor Alawar Entertainment ha anunciado que The Last Gas Station, una nueva propuesta que combina simulación, ambientación inquietante y estética pixel art, llegará próximamente a PC a través de Steam. Este original título propone al jugador recuperar una vieja estación de servicio olvidada en mitad de un paraje aislado, mientras desentraña el extraño destino de su antiguo propietario, desaparecido sin dejar rastro.


Una gasolinera con más de un secreto
En The Last Gas Station, el jugador hereda una antigua estación de servicio y el pequeño comercio anexo, ambos en un estado lamentable. El objetivo será devolverles la actividad poco a poco, gestionando cada aspecto del negocio: desde surtir combustible y reponer productos, hasta mejorar los servicios y atraer a una clientela cada vez más escasa en un mundo dominado por los vehículos eléctricos.
A medida que se avanza, el jugador podrá renovar las instalaciones, añadir servicios como el inflado de neumáticos o el cambio de aceite, y personalizar tanto la decoración como la cartelería. Sin embargo, no todo es trabajo rutinario: el entorno guarda secretos y, según se sugiere, algo o alguien no quiere que salgan a la luz.
La noche no es segura
Aunque de día la actividad transcurre con cierta normalidad, al caer la noche la situación cambia. El juego advierte de una norma fundamental que no conviene romper: nunca salgas cuando oscurezca. Porque cuando la oscuridad cubre la estación, el bosque parece observar… y recordar.
Durante estas horas, la mecánica de supervivencia cobra protagonismo. Cerrar las puertas, apagar las luces y resistir hasta el amanecer se convierte en una parte esencial del juego, añadiendo tensión a una experiencia que alterna calma y peligro con sorprendente equilibrio.
Personaliza, gestiona y descubre
Además de las tareas diarias y los momentos inquietantes, The Last Gas Station permite al jugador modificar cada rincón del local: cambiar la disposición de los productos, diseñar carteles de neón, y adaptar el espacio a su propio estilo.
En definitiva, se trata de un simulador con alma narrativa, en el que la reconstrucción de un negocio olvidado se convierte también en una exploración emocional y atmosférica. The Last Gas Station es una historia sobre lugares que el mundo dejó atrás, sobre esfuerzos silenciosos por mantener algo en pie… y sobre los susurros que aguardan cuando nadie más mira.