Siscia Games ha anunciado que Pompeii The Legacy, su nuevo título de estrategia y construcción histórica, llegará en acceso anticipado el próximo 23 de septiembre de 2025. Con el lanzamiento a la vuelta de la esquina, los jugadores ya pueden descubrir un avance en el tráiler oficial disponible en Steam.
Reconstruir una ciudad y forjar un legado en la Roma imperial
Ambientado en el año 100 d.C., Pompeii The Legacy pone a los jugadores en el papel de líder de una familia romana encargada de devolver la vida a Pompeya tras la devastadora erupción del 79 d.C. El reto no se limita a levantar edificios, sino a gestionar recursos, promulgar leyes y tomar decisiones que marcarán tanto el destino de la ciudad como el de todo un linaje familiar.
La campaña abarca más de dos siglos de historia y permite interactuar con emperadores y figuras clave como Trajano, Adriano o Marco Aurelio. Cumplir sus misiones no solo aporta ventajas políticas y militares, sino que también refuerza la posición de la familia dentro del imperio. El progreso se divide en dos ramas principales. La tecnología abre paso a mejoras en infraestructuras y transporte, mientras que la filosofía otorga nuevas herramientas administrativas y formas alternativas de gobierno. Esta combinación invita a equilibrar la expansión material con el pensamiento y la cultura, elementos inseparables de la Roma imperial.
La gestión del comercio es otro de los pilares del juego. Los jugadores podrán establecer rutas a lo largo y ancho del Mediterráneo, negociar tratados con otras regiones y enfrentarse a un mercado cambiante y a menudo inestable. Sin embargo, la vida en Pompeya nunca está exenta de peligros: terremotos, erupciones volcánicas, plagas de langostas y epidemias son solo algunas de las amenazas que pondrán a prueba la resistencia de la ciudad y la habilidad de su gobernante.
Más allá de la estrategia, el corazón del juego reside en las decisiones familiares. Cada elección influye en generaciones posteriores, consolidando o debilitando un legado que se mide tanto en la prosperidad de Pompeya como en el prestigio de quienes la dirigen.


