Akira Toriyama es uno de los nombres más influyentes en la historia del manga y el anime. Creador de Dragon Ball y Dr. Slump entre otros, ha conseguido llegar hasta nuestras vidas en gran medida. Desgraciadamente, el maestro Toriyama falleció el pasado 1 de marzo, dejando un vacío en nuestros corazones. Debido a esto, hoy comentaremos un poco su trayecto, para honrar su memoria.
Inicio de la leyenda
Nuestro maestro, antes de ser mangaka, era un mero publicista que diseñaba carteles de propaganda. Rápidamente aborrecería este empleo y perseguiría sus sueños, consiguiendo un contrato con la editorial Shūeisha. De esta manera, el viaje de Toriyama en la industria del manga comenzó en 1978 con la publicación de Wonder Island en la revista Weekly Shōnen Jump. Aunque su debut no fue un éxito rotundo, su estilo único y sentido del humor lo llevaron rápidamente a destacar. Su primer gran éxito llegó con Dr. Slump en 1980, una comedia absurda sobre un inventor y su creación, una niña robot llamada Arale. Así, Dr. Slump consolidó a Toriyama dentro de la industria y sentó las bases de lo que serían las bases de su obra magna.
La infancia de millones
Sin duda, el mayor legado de Akira Toriyama es Dragon Ball. Comenzando este manga en 1984, la historia de Son Goku, que emprende un viaje en busca de las legendarias Dragon Balls, se convirtió en una obra maestra que recorrió el mundo entero. La inspiración del mismo en sus inicios se remonta a la novela china de 1592 Viaje al Oeste.
Dragon Ball evolucionó notoriamente durante la serialización de la misma. Su primera parte es ciertamente más similar a otras obras anteriores de Toriyama, con un humor gamberro y un gran enfoque cómico. Poco a poco fue centrándose más en los combates y los peligros que amenazaban a nuestros héroes, como ya todos sabréis. Esto se fue transformando en una obra más seria y épica, que pronto capturó la atención de una audiencia global.
El éxito de Dragon Ball no solo revolucionó la industria del manga y el anime, sino que también cambió la forma en que el mundo veía estas formas de entretenimiento. La serie inspiró innumerables adaptaciones, videojuegos, películas, y se convirtió en una parte integral de la cultura popular en todo el mundo. La influencia de Toriyama es evidente en la gran cantidad de obras que han seguido su estilo narrativo. Otros mangakas como Masashi Kishimoto y Eiichiro Oda, autores de Naruto y One Piece, han comentado la gran devoción que rinden por Toriyama.
Akira Toriyama en la industria del videojuego
Akira Toriyama no solo ha dejado una huella imborrable en el manga y el anime, sino también en la industria del videojuego. Su estilo visual único, caracterizado por personajes dinámicos y diseños de criaturas extravagantes, ha sido aprovechado en numerosos títulos que siguen siendo populares hasta el día de hoy. Desde los años 80 hasta la actualidad, Toriyama ha trabajado en una amplia gama de proyectos que han marcado a generaciones de jugadores.
Una colaboración clave con Dragon Quest
Uno de los ejemplos más conocidos de su influencia en los videojuegos es su colaboración con la saga Dragon Quest. Toriyama se unió al equipo de desarrollo de la serie en 1986, trabajando como diseñador de personajes. Dragon Quest, creado por Yuji Horii y con la música de Koichi Sugiyama, se convirtió en uno de los RPG más exitosos de Japón, y el estilo de Toriyama fue esencial para darle una identidad visual que perdura en cada entrega. Los personajes de Dragon Quest, desde los héroes hasta los monstruos, han sido diseñados con la firma de Toriyama, quien ha sabido combinar su estética manga con los elementos de fantasía típicos de los RPGs.
La magia de Chrono Trigger
Otra de las grandes colaboraciones de Toriyama en el mundo de los videojuegos fue con Chrono Trigger (1995), un título desarrollado por Square (ahora Square Enix) para la Super Nintendo. Considerado uno de los mejores RPGs de todos los tiempos, Chrono Trigger contó con la participación de Toriyama en el diseño de los personajes. Su trabajo en el juego abarcó no solo a los protagonistas, como Crono, Lucca y Marle, sino también a los villanos y las criaturas que habitan el vasto mundo del juego. La combinación de la narrativa profunda y los diseños de Toriyama contribuyó enormemente al atractivo visual y emocional de Chrono Trigger, que sigue siendo un referente para los amantes de los RPGs.
Otras colaboraciones en videojuegos
Además de Dragon Quest y Chrono Trigger, Toriyama también ha trabajado en varios títulos menos conocidos, pero igualmente influyentes. Por ejemplo, diseñó personajes para Tao’s Adventure: Curse of the Demon Seal (2002), un RPG de aventura para la Game Boy Advance, y tuvo participación en otros juegos como Blue Dragon (2006) y Dragon Ball Z: Budokai (2002). En estos títulos, su influencia es evidente en los diseños estilizados de los personajes, que mantienen la esencia de sus famosos mangas pero adaptados al mundo de los videojuegos.
Creación de mundos fantásticos en 3D
Toriyama no solo ha sido responsable del diseño de personajes, sino que también ha sido un pilar en la creación de universos y mundos completos para las franquicias con las que se ha involucrado. En Blue Dragon, un juego para Xbox 360, trabajó junto al creador de Final Fantasy, Hironobu Sakaguchi, para crear un mundo de fantasía visualmente impresionante. Blue Dragon es un claro ejemplo de cómo Toriyama pudo trasladar su experiencia en el manga al mundo tridimensional de los videojuegos, creando personajes y criaturas con una estética única que resalta en un entorno 3D.