Tras su lanzamiento en PC el pasado mes de abril, Detective Dotson ha llegado el 30 de septiembre a Nintendo Switch. Esta aventura de misterio invita a los jugadores a resolver casos en las calles de la India, combinando una estética colorida con un tono acogedor y un protagonista muy peculiar: un detective con aspiraciones de estrella de Bollywood.
Misterios, pistas y un toque de humor
En esta propuesta, el jugador asume el papel de un investigador que, caso tras caso, descubre que cada resolución abre la puerta a un secreto mayor. A lo largo de cuatro misiones principales, la historia se va volviendo más intrigante y compleja, hasta culminar en un gran caso final que enlaza todos los acontecimientos anteriores. De esta forma, la trama mantiene el interés constante y recompensa la atención a los detalles.
Además, Detective Dotson llama la atención por su encantador elenco de personajes y su estilo visual. Los ciudadanos, presentados con un diseño en 2D dentro de un mundo 3D, no solo aportan humor y personalidad, sino que también son esenciales para avanzar. Es posible conversar con más de 50 personajes, intercambiar objetos, negociar precios y obtener pistas valiosas. Por tanto, la comunicación y el comercio se convierten en piezas clave del progreso dentro de la aventura.
Por otro lado, el sistema de juego invita a explorar con calma. Los jugadores pueden recorrer libremente las calles, visitar mercados, recolectar objetos y participar en minijuegos para conseguir monedas. Con ellas, se pueden adquirir artículos que resultan útiles para resolver los casos, desde comida callejera hasta incienso tradicional. Así, cada pequeño detalle contribuye a la investigación y al avance de la historia.
Asimismo, el sistema de regateo es una de las mecánicas más representativas del título, ya que refleja de manera divertida una práctica cotidiana en la India. Este aspecto, junto a los minijuegos como el cricket o el baile de Bollywood, añade variedad y frescura a la experiencia. De esta manera, la investigación se combina con momentos más distendidos que aportan ritmo y naturalidad al desarrollo.
