Hace ya 14 años, el desarrollador independiente Guilherme Martins dio comienzo a la saga Momodora, una serie de títulos freeware inspirados por la presencia de juegos indie como Cave Story. Hoy, analizamos Momodora: Moonlit Farewell, la quinta y última entrega de la saga, que pretende poner el punto y final a la franquicia.
Fecha de salida | 11 de enero de 2024 |
Plataformas disponibles | PC |
Desarrolladora | Bombservice |
Distribuidora | Playism |
Plataforma analizada | PC (Steam) |
Historia
“El tañido de la Campana Negra. Trece veces resonó bajo el cielo iluminado por la luna. Trece veces atrajo a la muerte y la oscuridad. Que los dioses se fijen en nosotros y nos concedan su misericordia…”
Con estas palabras, da comienzo la historia de Momodora: Moonlit Farewell. Su protagonista no es otra que Momo Reinol, la sacerdotisa de la pacífica Aldea de Koho, que comienza su aventura descendiendo al subsuelo que rodea su villa natal. Las malas noticias no tardan en llegar: un misterioso ser ha robado la Campana Negra y, haciendo uso de su poder, ha liberado a cientos y cientos de demonios con tal de desatar el caos.
Aunque Momo intenta seguir el tañido de la campana, en busca de su usurpador, es emboscada por un demonio y, a pesar de salir victoriosa, se precipita al vacío. Días después, despierta inconsciente en su hogar. Con la invasión demoníaca aproximándose más y más, será su deber recuperar la oscura campana, y restaurar la paz al mundo.
Aun siendo una secuela directa de sus predecesores, Moonlit Farewell hace un gran esfuerzo en resumir hechos pasados de forma sencilla, con el objetivo de que todos sus jugadores puedan disfrutar de ella sin la necesidad de informarse a base de material externo, mediante el apartado de Notas. Este ofrece datos de importancia sobre la historia de la saga, y sobre los personajes que protagonizan esta aventura.
Aventura en la que, acompañando a Momo, los jugadores visitarán tierras misteriosas, viajarán a lugares recónditos, y entablarán amistad con pintorescos personajes, con tal de perseguir al ladrón de la Campana Negra.
Jugabilidad
De forma similar al anterior título de la saga, Moonlit Farewell se presenta a sí mismo como un metroidvania en 2D. Este género se caracteriza por combinar acción, plataformas, exploración, y ligeros elementos de rol, una plantilla que esta quinta entrega de la saga Momodora explora algo más a fondo.
Haciendo uso de su Hoja y Arco, Momo tendrá que explorar las distintas áreas que componen el mundo que rodea a la Aldea de Koho. Conforme los jugadores progresen por cada zona, la protagonista obtendrá nuevas habilidades, como un doble salto, la habilidad de correr, o de destruir ciertos obstáculos.
Como todo buen metroidvania, este planteamiento refuerza inmensamente la curiosidad del jugador. Puesto que cada zona individual no es excesivamente extensa, Momodora puede permitirse colocar objetos fuera del alcance del personaje principal, incitando a quien esté a los mandos a volver más tarde. Una tarea que resultará más sencilla de lo que parece gracias al detallado mapa que ofrece el juego.
A diferencia de otros títulos del género, Moonlit Farewell no cuenta con un sistema de puntos de experiencia. Para mejorar ataque, salud, maná, y otras estadísticas de Momo, será necesario recolectar distintos objetos, como Lirios Celestiales, o Bayas de Lunares.
Esta filosofía también se extiende a los sellos, equipables mágicos que otorgan a la protagonista distintos poderes, y que se encuentran escondidos por los niveles, o que pueden ser fabricados por Cereza, la acompañante de Momo, a cambio de Cristales Lunares.
Campana, dulce Campana
Estos cristales actúan como la moneda de cambio del juego, y no sólo pueden usarse para mejorar a la protagonista, sino también, para pagar a distintos personajes a cambio de objetos, o incluso pescar. Las Campanas actúan como puntos de guardado, restaurando la salud y maná de Momo, y ofreciendo un lugar donde reaparecer en caso de caer en combate.
Sin embargo, mediante el pago de Cristales Lunares, es posible obtener efectos positivos temporales. Efectos que serán de inmensa ayuda, pues muchos niveles presentan un nivel desafío duro, pero muy justo.
Respecto al sistema de combate, Momodora: Moonlit Farewell presenta una jugabilidad muy sólida. Si bien no se consume al atacar, Momo cuenta con una barra de estamina, que se gastará al ejecutar acciones como rodar o correr. Sin embargo, esquivar ataques en el momento perfecto recuperará rápidamente este medidor, incitando a los jugadores a ser agresivos, pero con cautela.
Apartado técnico
Para empezar, se trata de un título que acierta de lleno con el aspecto más importante para los videojuegos de este género: los controles. El esquema que utiliza Moonlit Farewell es extremadamente sencillo, con las acciones principales, como saltar o atacar colocadas cómodamente en los botones principales del mando.
Otro aspecto positivo viene de la mano del manejo de la protagonista. Momo Reinol es un personaje ágil, que responde con exactitud a las acciones del jugador, cumpliendo con las expectativas que deberían exigirse a cualquier título de este género. Cabe destacar la fluidez de las físicas, que además son sumamente consistentes, haciendo que el plataformeo sea una gozada.
En cuanto a su rendimiento, la versión de PC cuenta con multitud de opciones para adaptarse a cualquier equipo, siendo un título muy poco exigente en cuanto a sus requisitos. Es cierto que existen bugs menores, como comandos que aparecen de forma errónea en pantalla, o las complicaciones de la cámara para centrar a los personajes durante ciertas conversaciones.
Apartado gráfico y artístico
Momodora: Moonlit Farewell presenta un precioso apartado gráfico de estilo pixel-art, que da vida a escenarios inspirados en el arte surrealista. Los píxeles que componen el apartado visual del juego no se quedan cortos en absoluto, con multitud de detalles como las animaciones del agua, las amplias capas de parallax que componen los fondos, y las detalladas animaciones de los personajes.
Es necesario, aún así, poner un pequeño “pero”, pues existen pequeños errores gráficos en zonas muy puntuales, como capas que no se desplazan correctamente junto a la cámara. Además, no todos los sprites muestran el mismo nivel de detallismo, en especial, los más grandes.
También, en ocasiones, pueden darse situaciones en las que la pantalla se inunde de efectos visuales en combate, dificultando la visibilidad del jugador.
Apartado sonoro
Momodora hace uso de una BSO de carácter atmosférico, con una constante aparición del piano como pilar sobre el que orbitan muchas de sus melodías. Cada nivel posee una canción única, que hace un trabajo excelente a la hora de elevar aún más la envolvente atmósfera que crea su apartado visual.
Destacan, en especial, los momentos más chocantes de la aventura de Momo, donde la sensación de misterio y descubrimiento que traen algunas de sus piezas más reconocibles, dejan paso a tensas y tenebrosas melodías, que representan a la perfección los horrores de la invasión demoníaca.
Al igual que con el apartado gráfico, existe un pequeño «pero», y es la presencia de problemas de solapamiento de sonido. A menudo, golpear a varios enemigos a la vez, o las acciones de varios contrincantes al mismo tiempo, pueden producir sonidos extremadamente altos que, haciendo uso de auriculares, resultan más que estridentes.
Conclusión
Momodora: Moonlit Farewell es un título que puede actuar perfectamente como una puerta de entrada al género metroidvania. Su exigente sistema de combate, y duros combates contra jefes, no discriminan a los jugadores menos habilidosos, gracias a un modo de dificultad adaptativa, y distintas funciones de accesibilidad.
Su bello apartado artístico, y su envolvente atmósfera son la guinda para un sistema de jugabilidad muy pulido, y muy desafiante. Ayuda, también, que el diseño de niveles está muy cuidado, y la aventura rara vez dejará perdidos a sus jugadores.
Por último, a pesar de ser el supuesto punto final a la saga, Moonlit Farewell se esfuerza en no aislar a sus jugadores de su narrativa, aportando detalles claros sobre el trasfondo de los personajes más recurrentes.
Si bien sus problemas técnicos pueden ser molestos en ocasiones, cabe destacar que sus desarrolladores, hasta el momento de publicación de este análisis, han presentado hasta 12 parches que corrigen una amplia cantidad de bugs.
Lo mejor
- Excelente diseño de niveles.
- Entra muy bien por la vista y el oído.
- El ritmo de la trama está muy bien llevado.
Lo peor
- Pequeños bugs que pueden resultar muy molestos.
- La curva de dificultad es algo irregular.
- Algunos sprites no tienen el mismo cuidado que el resto.
Nuestra valoración
Este análisis ha sido posible gracias a una clave cedida por Games Branding.