Citadelum: Consigue la grandeza en la Antigua Roma

Citadelum es un fascinante videojuego de estrategia que te transporta a la Antigua Roma. En él, los jugadores asumen el desafío de construir y gestionar su propio asentamiento, fusionando elementos de exploración y combates tácticos. A medida que avanzas, podrás desarrollar tu aldea hasta convertirla en una próspera metrópoli.

Para este análisis, hemos utilizado capturas de las primeras horas de juego, asegurándonos de no arruinar la experiencia para los jugadores.

Historia: Por la gloria de Roma

El juego ofrece una campaña compuesta por 10 capítulos, donde los dos primeros actúan como tutoriales para familiarizarnos con las mecánicas del título. La historia nos sitúa en el contexto histórico que sigue a la guerra civil romana desatada tras el asesinato de Julio César. Gaius Octavius, u Octaviano como lo conocemos, regresa a Roma con la intención de vengar la muerte de su padre. Su primer desafío es enfrentarse a Lucius Antonius (Lucio Antonio), hermano de Marcus Antonius (Marco Antonio), en la ciudad de Perusia.

Después de sitiar la ciudad, Octaviano ordena su destrucción como castigo a los traidores. ¿Nuestra misión? Trasladarnos allí con un grupo de colonos para iniciar la construcción de una nueva ciudad, que llevará el nombre de Augusta Perusia.

Jugabilidad: Un clásico con toques modernos

Si eres un jugador habitual de juegos de estrategia, encontrarás la jugabilidad bastante familiar, aunque con algunos detalles que le dan al título su propia personalidad. Para hacerlo más ameno, hemos dividido la jugabilidad en diferentes apartados.

Primeros pasos…

Lo primero que deberemos hacer es construir el Foro, que funciona como el núcleo de nuestro centro urbano y será el punto de partida para desarrollar nuestra metrópolis. Te recomendamos ubicarlo cerca de una fuente de agua, ya que este recurso será fundamental para el crecimiento y el bienestar de nuestros ciudadanos.

Contaremos con dos tipos de ciudadanos: la plebe, que representará nuestra principal fuerza laboral, y los patricios, quienes fueron la clase más privilegiada en la Antigua Roma. Estos últimos serán nuestra principal fuente de ingresos, ya que solo podremos recaudar impuestos de ellos para llenar las arcas de nuestra metrópolis.

Manos a la obra

Roma no se construyó en un día, y nuestra ciudad tampoco. Poco a poco, iremos aumentando la población construyendo casas y otros edificios que proporcionarán trabajo a los plebeyos. Todos los edificios deberán estar conectados por caminos para que los ciudadanos puedan desplazarse. Entre las distintas construcciones disponibles, encontraremos campos de cultivo, aserraderos, minas, almacenes y muchas más, cada una con una función específica, como recolectar materiales para la construcción o producir alimentos para abastecer a nuestros ciudadanos.

Como mencionamos al principio, el agua es fuente de vida en cualquier civilización, y la nuestra no será la excepción. Para suministrar agua a nuestros ciudadanos, deberemos construir pozos o majestuosos acueductos, que nos permitirán abastecer grandes extensiones de tierra y garantizar el desarrollo de la ciudad.

Exploración, bendiciones y.. Represalias

El juego incorpora una mecánica de exploración que nos permite descubrir otras ciudades con las que podremos comerciar o incluso entablar combates, aunque esto lo abordaremos con más detalle más adelante. Para explorar, contaremos con un explorador que podremos mover de zona en zona, revelando áreas cubiertas por la niebla después de un corto periodo de tiempo. Si logramos descubrir otra ciudad, podremos establecer rutas comerciales para comprar o vender los recursos que produzcamos o necesitemos en ese momento.

Además, el juego incluye una mecánica de religión, muy acorde con la Antigua Roma, donde la religión era politeísta, es decir, creían en varios dioses. Podremos construir templos dedicados a diferentes deidades y realizar tributos para obtener su ayuda divina. Cada dios otorga bonificaciones especiales, como reducir el hambre en las casas o mejorar los cultivos, entre otros beneficios.

Los dioses pueden ser muy benevolentes, pero también causar estragos si no les rendimos pleitesía. Desde el menú, podremos consultar el favor de cada dios hacia nosotros y su estado actual. Es importante construir todos los templos y ofrecer tributos regularmente para mantener a los dioses contentos. De lo contrario, podrían descender sobre nuestra metrópolis y desatar el caos.

Sube de prestigio

Contaremos con una amplia variedad de estructuras que aportan diversidad al juego y recrean fielmente las edificaciones típicas de una ciudad romana durante el «siglo de Augusto». Para desbloquear todas estas construcciones, será necesario aumentar el prestigio de nuestro asentamiento. ¿Cómo lo logramos? Incrementando la población y mejorando los edificios existentes, los cuales necesitarán cumplir ciertos requisitos para poder subir de nivel. A medida que avancemos, desbloquearemos nuevos edificios con funciones adicionales que nos permitirán expandir aún más nuestra ciudad.

Reclutamiento y sistema de combate

Para formar nuestras poderosas legiones, que algún día conquistarán el mundo, debemos avanzar paso a paso. Comenzaremos construyendo los talleres necesarios para la fabricación de arcos, armaduras o escudos, y prepararemos un centro de adiestramiento, además de uno más especializado para reclutar tropas como arqueros o legionarios. Una vez tengamos todo lo necesario, podremos desplegar en el mapa regional una legión compuesta por las distintas unidades que hayamos preparado.

Las legiones, al igual que los exploradores, pueden moverse de una zona a otra. Si nos encontramos con una unidad enemiga que impida nuestro avance, será necesario iniciar un combate, donde deberemos desplegar nuestras fuerzas para enfrentarlas.

Una vez en la zona de combate, debemos determinar la formación que adoptarán nuestras tropas. Al iniciar la batalla, los ejércitos avanzarán hasta encontrarse cara a cara. Cada unidad tiene sus propias fortalezas y debilidades, por lo que será crucial evaluar las fuerzas enemigas y decidir qué tropas serán más efectivas, evitando lanzarnos a la batalla sin una estrategia clara. Por ejemplo, los legionarios son fuertes contra la caballería, mientras que los arqueros son vulnerables ante ella, pero son eficaces contra las tropas de espadas.

Aunque las unidades se mueven automáticamente, tendremos la capacidad de dar órdenes para dirigir la contienda. Podemos establecer puntos de ataque para que avancen y enfrenten a las unidades enemigas cercanas, o adoptar una formación defensiva mientras esperan el encuentro con el enemigo. Además, contaremos con una barra que indica cuál facción lleva la delantera en la contienda. Si la situación se torna desfavorable, podremos optar por retirarnos para salvar la vida de la mayoría de nuestras tropas y preservar nuestra fuerza para futuras batallas.

Modo Sandbox y editor de mapas

Primero, hablemos sobre los diferentes editores que los jugadores podrán utilizar para compartir nuevo contenido dentro de la comunidad de Citadelum. Para crear contenido, deberás emplear diversos editores que te permitirán diseñar todos los elementos que componen una misión. Sin embargo, es importante señalar que algunos contenidos dependen de otros para poder ser creados. Por ejemplo, en el caso del editor de batallas, necesitarás establecer primero el área donde tendrá lugar dicha contienda.

Con estas herramientas, podrás crear una amplia variedad de mapas y las misiones que los acompañen, incluyendo batallas emocionantes que añadirán diversión y desafío al juego. Todo este contenido se puede importar al Steam Workshop, permitiendo que otros jugadores descarguen y disfruten de las creaciones que has diseñado.

Además, Citadelum ofrece un modo sandbox, que te permite jugar con total libertad sin estar sujeto a las misiones impuestas por los 10 capítulos de la campaña. En este modo, tendrás la libertad de ajustar el nivel general de diversas opciones, como las batallas y las necesidades de tus habitantes. También podrás decidir si quieres que ocurran eventos aleatorios, como enfermedades o incendios, lo que añade un toque de desafío y emoción a tu experiencia de juego.

Apartado técnico

Citadelum se presenta como un juego bastante sólido, y durante nuestra experiencia no hemos encontrado bugs que puedan perjudicar la jugabilidad. Su rendimiento se mantiene estable, sin caídas de FPS que interfieran con la inmersión. Esta estabilidad permite a los jugadores disfrutar de la construcción y gestión de su ciudad sin interrupciones, lo que contribuye a una experiencia general fluida y satisfactoria.

Apartado gráfico y artístico

Citadelum se presenta con gráficos isométricos que evocan el estilo clásico de los juegos de construcción de ciudades. Aunque no busca deslumbrar con gráficos espectaculares, esta elección es acertada, ya que se enfoca en la atención al detalle, logrando una inmersión efectiva en la época. Los movimientos de los habitantes y las tropas son fluidos y naturales, lo que evita cualquier sensación de torpeza o erraticidad. Además, el juego hace un uso notable de la iluminación y los efectos de partículas, elementos que contribuyen a crear una atmósfera envolvente y visualmente atractiva.

Apartado sonoro

El apartado sonoro de Citadelum está muy bien compuesto, ya que enriquece la experiencia del jugador, creando una atmósfera inmersiva que complementa la ambientación histórica del juego con una banda sonora inspirada en la época, que acompaña las diversas actividades y escenarios del juego. Las melodías evocadoras no solo elevan la narrativa, sino que también transportan al jugador a tiempos pasados y permitiéndole vivir la experiencia de construir y gobernar su propia ciudad.

Conclusión

Citadelum es un juego que no decepciona; es un verdadero viaje al pasado no solo por su rica ambientación histórica, sino también por su diseño intuitivo y atractivo. Para aquellos de nosotros que comenzamos nuestra aventura en este tipo de títulos, el juego evoca un golpe de nostalgia que seguramente disfrutarás al máximo. Su campaña bien estructurada, su modo sandbox que permite la libertad creativa, y, por supuesto, su editor de mapas, ofrecen una experiencia variada y emocionante.

Lo mejor

• Ambientación y banda sonora
• Gran variedad de edificaciones
• Contenido ifinito gracias a la aportación de la comunidad con el editor
• Puedes poner el idioma en latín

Lo peor

• Exploración algo limitada
• El combate automático quizás quite un poco de inmersión y toque estratégico

Nuestra valoración de Citadelum