Papertris: un buen homenaje a los 80

Flynn’s Arcade nos trae el último juego de Paper Games. Papertris es un mezcla de los tan aclamados juegos de móvil como Candy Crush Saga con una estética peculiar y una inspiración muy clara a los juegos de puzles tipo Tetris que tantas horas nos robaron en los 80.

En este caso nos encontramos ante un juego que no es fácil de analizar. Al ponernos delante de la pantalla vemos una estética peculiar y nos da la sensación que será otro juego de puzles tipo Tetris que nos aburrirá enseguida por la falta de desafío. Pero no podemos estar más equivocados.

Papertris es un verdadero pozo de horas en el que, si entramos, no podremos salir fácilmente. La premisa es muy sencilla, debemos juntar bloques del mismo color en grupos de tres como mínimo para que desaparezcan. El girito viene cuando nos damos cuenta de que estamos algo limitados en cuanto a movimiento.

Y detrás de todo se esconde una sorpresa final. No solo deberemos estar pendientes de lo que vemos si no también de lo que no vemos. Si en Paper_Games querían darle una vuelta al género de puzles con este adictivo juego lo han conseguido.

Jugabilidad

Papertris nos presenta una jugabilidad que no sorprende demasiado. Como os comentábamos más arriba, la premisa es bastante sencilla pero han conseguido darle una vuelta de tuerca para ofrecernos nuevos desafíos.

El juego se desarrolla en un cubículo de 9×15 con doble profundidad. Conforme van bajando los cubos de papel de diferentes colores debemos ir colocándolos para conseguir juntar al menos tres del mismo color para eliminarlos. Una mecánica muy conocida, la de juntar 3 piezas iguales, en los juegos de móvil que tantas horas muertas hemos jugado.

Lo bueno es que podemos reordenar los colores para poder conseguir esos grupos. Lo malo es que siempre tenemos paquetes de 3 que caen verticalmente y no podemos ponerlos de en horizontal. Esta limitación hace que las estrategias que podamos trazar para conseguir combos más grandes se limite bastante.

Modos de juego

Este título tiene un modo de juego multijugador local y dos modos de juego para el single-player. En el multiplayer nos enfrentamos a la persona que tengamos al lado (no hay online) en un modo donde gana el que más puntos haga. No tiene mucha historia.

Donde si le podemos sacar provecho es en los modos single-player. En el primer modo (Sin Fin) es como el multiplayer pero jugando solo. Pero en el segundo (Desafíos) nos presentan diferentes pantallas en las que deberemos cumplir objetivos para pasar a la siguiente fase.

Conforme vayamos avanzando en los desafíos nos iremos encontrando retos de todo tipo. Desde destruir un número concreto de bloques de unos colores seleccionados hasta evitar destruir unos bloques marcados. Y todo con un incremento de dificultad mayor con cada nivel que superemos.

Si bien nos dan una cuenta atrás para pasar las fases, son pocas las veces en las que esto es una limitación real. La mayoría de las veces podemos pasarnos de tiempo sin penalización. Papertris quiere que nos quedemos todo el tiempo posible y penalizarnos por pasarnos de tiempo no es la mejor idea para conseguirlo.

En los modos Sin Fin nos enfrentaremos a una persona o a la IA en un duelo por ver quien consigue más puntos sin rellenar el cubículo. Por cada 20 bloques destruidos subiremos de nivel y nos aumentarán un poco la velocidad. Por cada 5 niveles nos sumarán un color. Así hasta que no seamos capaces de ubicar de manera correcta los bloques para eliminarlos.

Accesibilidad

Uno de los aspectos a remarcar del juego son las opciones de accesibilidad. En un juego basado en los colores es muy importante evitar cualquier detalle que pueda hacer que alguien no pueda jugar. Para solventar esto han implementado un modo Daltónico en el que nos suavizan los colores y nos diferencian los bloques con iconos.

También tenemos disponible un modo oscuro para no forzar tanto la vista puesto que tener toda la pantalla en blanco puede crearnos molestias. También tenemos la posibilidad de variar los fondos para hacer menos monótono. Algo a mejorar sería que solo hay 3 diseños para intercambiar por lo que tampoco es algo muy espectacular.

Conclusión

Tenemos ante nosotros un título que no pretende ser una evolución de nada pero sí que pasemos horas delante de la pantalla. No sé si es por la estética de papel tan peculiar o por la sencillez de las mecánicas, pero consigue que se nos pasen las horas sin darnos cuenta.

Y el modo desafío puede ser un pozo del que es muy difícil salir. Además tenemos una tabla de puntuaciones online que hará que nos piquemos al más puro estilo Olli Olli World por conseguir ser los mejores del mundo. Es un juego ideal para pasar tardes divertidas con amigos nostálgicos.

Nuestra valoración de Papertris