Análisis

Tomb Raider IV-VI Remastered: Lara Croft en estado puro

La trilogía Tomb Raider IV-VI Remastered nos transporta de nuevo a la época dorada de los juegos de aventuras, con Lara Croft en su máximo esplendor. Para quienes crecimos con estos títulos, es un regreso nostálgico. Para los nuevos jugadores representa una oportunidad de experimentar un capítulo fundamental en la historia del gaming. Adentrémonos en las profundidades de alguna mazmorra y descubrámoslo.

Fecha de salida: 14 de febrero de 2025
Desarrolladora:
Aspyr
Distribuidora:
Embracer Group
Plataformas disponibles:
PC, Nintendo Switch, PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One, Xbox Series X|S
Textos: Español
Voces: Español
Plataforma analizada:
PlayStation 5

Historia: Un recorrido por la trilogía

Tomb Raider: The Last Revelation

La historia de The Last Revelation (IV) presenta a una Lara Croft más vulnerable y menos invencible que en sus aventuras anteriores. En esta entrega, Lara se embarca en una expedición en Egipto, donde accidentalmente libera a Seth, una deidad egipcia atrapada por antiguos faraones debido a su potencial para desatar el caos. A lo largo del juego, Lara no solo enfrenta desafíos físicos en forma de trampas y enemigos, sino también conflictos emocionales, particularmente con su mentor Werner Von Croy. The Last Revelation no solo cierra una era de aventuras, sino que redefine a Lara como un personaje más complejo, al enfrentarla con una amenaza cósmica que ella misma ha desatado.

Tomb Raider: Chronicles

Chronicles (V) adopta una estructura narrativa diferente, más fragmentada, al centrarse en las memorias de los amigos y aliados de Lara. La historia se presenta como una recopilación de relatos que revelan diversas facetas de la vida de Lara a través de sus hazañas pasadas. Cada capítulo lleva al jugador a diferentes momentos clave de su carrera como arqueóloga. A lo largo del juego, se exploran episodios ambientados en diferentes partes del mundo, como Roma, Rusia y Nueva York, donde Lara se enfrenta a nuevos retos y enemigos, desde artefactos poderosos hasta antiguas organizaciones secretas. Esta estructura de antología permite una narrativa más dispersa.

Sin un hilo argumental central, da lugar a una sensación de nostalgia y homenaje al legado de Lara. Sin embargo, esta falta de un conflicto central puede restar cohesión y continuidad a la historia, haciendo que Chronicles se sienta más como una celebración de su personaje que como una expansión narrativa profunda. Al final, el juego deja la puerta abierta a nuevas aventuras, pero sin proporcionar una conclusión definitiva sobre el destino de Lara, lo que mantiene su legado intacto pero en suspenso.

Tomb Raider: The Angel of Darkness

The Angel of Darkness (VI) marca un giro hacia una historia más oscura y madura para Lara Croft. En este juego, Lara es acusada injustamente de un asesinato, lo que la obliga a huir y embarcarse en una investigación para desentrañar la verdad. A medida que avanza, Lara se ve atrapada en una conspiración que involucra artefactos místicos y una sociedad secreta conocida como La Orden, que busca desatar un poder oscuro. La narrativa de The Angel of Darkness se aleja del enfoque de aventuras y enigmas para explorar una trama más filosófica y psicológica, en la que Lara enfrenta tanto enemigos externos como su propia lucha interna.

La historia se caracteriza por un tono sombrío, lleno de traiciones, secretos y dudas sobre la moralidad de los personajes. Lara, en lugar de ser simplemente la heroína, se convierte en una figura más ambigua y vulnerable, atrapada entre la traición de aquellos en quienes confiaba y la corrupción de las fuerzas oscuras a las que se enfrenta. Este enfoque en la psicología de Lara y su desconfianza en su entorno ofrece una narrativa más madura y reflexiva. Sin embargo, el juego no logra una resolución completa, dejando varios cabos sueltos que impiden una conclusión satisfactoria. The Angel of Darkness representa un intento de la franquicia por reinventar a Lara Croft y llevar la historia en una dirección más compleja y adulta.

Jugabilidad: Reinvención y pasos atrás

Tomb Raider: The Last Revelation

En The Last Revelation, la jugabilidad se centra en una experiencia profundamente interconectada y orientada a la exploración. Los niveles están diseñados de manera que el jugador debe regresar a áreas anteriores con objetos nuevos, lo que obliga a pensar en el entorno de forma global y no solo en el nivel actual. Esta estructura de «interconexión de niveles» fomenta la resolución de acertijos complejos y una exploración densa, donde cada rincón puede esconder un secreto o una clave para avanzar. La dificultad en este juego es considerable, ya que muchos puzles requieren observación detallada y memoria espacial.

En términos de combate, el jugador debe gestionar cuidadosamente los recursos, ya que las municiones y la salud son limitadas, lo que agrega un nivel de estrategia al enfrentarse a hordas de enemigos. El control de Lara también es preciso, lo que permite realizar saltos y movimientos con mayor fluidez. Sin embargo, el reto real proviene de los entornos laberínticos, que pueden ser confusos y demandan una comprensión clara de las rutas y el uso adecuado de los objetos.

Tomb Raider: Chronicles

Chronicles ofrece una jugabilidad más diversificada, en la que se incluyen niveles con diferentes enfoques. Algunos se centran en la acción, mientras que otros incorporan sigilo, lo que aporta una capa estratégica a la jugabilidad. Lara debe evitar ser detectada en ciertas secciones, lo que implica estudiar los patrones de los enemigos y usar el entorno a su favor. La jugabilidad aquí también se enfoca en un uso más fluido de las habilidades de Lara, como trepar, deslizarse por ranuras y desarmar enemigos, lo que le da mayor dinamismo a la acción. Sin embargo, la mayor crítica a la jugabilidad de Chronicles es su diseño de niveles más lineal.

En comparación con The Last Revelation, los niveles no se sienten tan interconectados, lo que reduce la sensación de exploración libre. Aunque los escenarios son visualmente impresionantes y variados, como las antiguas ruinas romanas o los oscuros pasillos de Nueva York, la falta de interacciones entre niveles hace que la sensación de aventura sea más guiada. Los puzles, aunque entretenidos, también pueden ser más fáciles en algunos momentos, con menos complejidad que en la entrega anterior. Esto hace que el juego sea un poco más accesible, pero quizás menos desafiante para los jugadores veteranos.

Tomb Raider: The Angel of Darkness

Con The Angel of Darkness, la jugabilidad dio un paso hacia la modernización con el sistema de progresión de habilidades, donde Lara mejora con el tiempo y desbloquea nuevas rutas en los entornos. Esto introdujo una sensación de crecimiento, similar a otros juegos de la época, aunque el sistema de progresión no estuvo tan pulido como se esperaba. El juego también experimentó con mecánicas de sigilo y combate cuerpo a cuerpo, lo que agregó una capa de complejidad al juego. Sin embargo, en su versión original, estos controles eran algo torpes, lo que dificultaba la experiencia. En la remasterización, la respuesta del control se ha mejorado significativamente, lo que facilita la ejecución de las nuevas mecánicas.

A pesar de estas mejoras, la exploración en The Angel of Darkness se siente más lineal que en sus predecesores. Los niveles no están tan interconectados, y el juego se enfoca más en rutas predeterminadas y misiones concretas. Aun así, el diseño de escenarios, especialmente la París nocturna, es visualmente atractivo, pero la falta de exploración libre es una de las mayores críticas que recibe el juego. La jugabilidad se siente más guiada, y aunque algunos puzles son interesantes, no se comparan con la complejidad de The Last Revelation. En términos de dificultad, The Angel of Darkness mantiene un buen nivel de reto, pero la falta de libertad y exploración abierta puede hacer que se sienta algo más limitado en comparación con los anteriores.

Contenido Adicional

Tomb Raider IV-VI Remastered incluye galerías de arte, entrevistas con los desarrolladores y la posibilidad de alternar entre gráficos clásicos y remasterizados, un gran acierto para los fans. Además, pequeños ajustes en el diseño de niveles y en la inteligencia artificial aportan una experiencia más equilibrada.

Apartado técnico

Respecto al apartado técnico, no hemos encontrado problemas serios en cuanto a rendimiento y optimización. La remasterización se ejecuta de manera estable en todas las plataformas, con tiempos de carga reducidos y una fluidez que se mantiene incluso en los momentos más exigentes. El cambio entre el apartado visual remasterizado y el juego original funciona de manera muy fluida con solo pulsar un botón, lo que permite a los jugadores comparar las mejoras en tiempo real.

La respuesta al mando es correcta, aunque sigue sintiéndose algo tosca en algunos momentos, especialmente en The Angel of Darkness, donde el sistema de control ya era problemático en su versión original. Aunque se han aplicado mejoras en la detección de colisiones y en la animación de Lara, algunos movimientos aún resultan menos precisos de lo deseado.

En general, la remasterización logra respetar la esencia de los títulos originales, corrigiendo ciertos errores sin alterar la experiencia clásica. No existen problemas de rendimiento significativos, lo que permite disfrutar de la trilogía sin interrupciones ni caídas notables de FPS.

Apartado gráfico y artístico

La remasterización de Tomb Raider IV-VI logra equilibrar la modernización gráfica con el respeto por la estética original de los juegos. Las texturas y modelos de personajes han sido mejorados, eliminando el aspecto pixelado de los títulos originales y ofreciendo una mayor nitidez y detalle en los entornos y personajes. Lara Croft, por ejemplo, presenta un diseño más detallado y fluido, con animaciones más naturales que mejoran la experiencia visual.

La dirección artística mantiene la esencia de cada título, pero los gráficos mejorados permiten una mayor inmersión. En The Last Revelation, las ruinas egipcias y templos ahora tienen más detalle y una iluminación más profunda que refuerza la atmósfera misteriosa del juego. Chronicles presenta entornos diversos, desde las ruinas romanas hasta las ciudades modernas, enriquecidos por texturas más detalladas. The Angel of Darkness, por su parte, ofrece una atmósfera más oscura y urbana, que se ve potenciada por los avances gráficos.

En resumen, la remasterización conserva la identidad visual de los juegos originales, mejorando los detalles gráficos y la atmósfera sin perder su esencia clásica. Se ofrece un trabajo muy similar al anterior recopilatorio de la saga, Tomb Raider I-III Remastered.

Apartado sonoro

La banda sonora de Tomb Raider IV-VI Remastered sigue siendo uno de los aspectos más destacados de la trilogía, manteniendo la esencia de las composiciones originales mientras se mejora la calidad del audio. Los temas, compuestos por Nathan McCree, suenan más nítidos y expansivos, lo que mejora la inmersión sin perder la atmósfera original. En The Last Revelation, las composiciones evocan aventura y misterio, mientras que en Chronicles, la música se adapta a las diversas localizaciones, desde Roma hasta Rusia, creando una atmósfera única para cada escenario.

Los efectos sonoros también se han refinado, con sonidos más nítidos de pasos, disparos y ambientes. Las explosiones, el eco en las tumbas y el ruido del agua se sienten más realistas, lo que aumenta la inmersión en el mundo del juego.

En comparación con Tomb Raider I-III Remastered, la remasterización de Tomb Raider IV-VI lleva el audio a un nivel superior, mejorando la calidad de la música y los efectos sonoros, lo que resulta en una experiencia más rica y detallada.

Conclusión

Si disfrutaste de la era clásica de Tomb Raider, esta remasterización es una carta de amor a los fans. Aunque sigue conservando la esencia de los originales, para lo bueno y para lo malo, las mejoras implementadas la hacen más accesible y disfrutable en la actualidad. Para los nuevos jugadores, representa una oportunidad de descubrir las raíces de una de las sagas más icónicas del gaming. Tomb Raider IV-VI Remastered nos recuerda por qué Lara Croft se convirtió en un ícono y por qué sus aventuras siguen siendo tan emocionantes décadas después.

Ya sean más lineales, más abiertas a la exploración o, en definitiva, más episódicas, nos sirven para recordar que Tomb Raider es una de las franquicias más importantes del medio y que este tipo de recopilatorios son claves para preservar el legado de sagas como esta. El trabajo de remasterizado es muy similar al anterior recopilatorio y, aunque sea por tener un pedacito de la historia del medio en nuestra biblioteca digital, creo que merece la pena.

Lo mejor

  • Notables mejoras gráficas
  • Banda sonora excelsa
  • Contenido adicional en forma de niveles descartados y artes digitales

Lo peor

  • Pocas novedades en jugabilidad
  • Control irregular en The Angel of Darkness
  • Juegos con menos exploración general

Nuestra valoración de Tomb Raider IV-VI Remastered

Este análisis ha sido posible gracias a una clave cedida por Sandbox Strategies.

Pedro A.

About Author

Historiador, amante del cine, de los gatos y de los murciélagos que protegen la ciudad gótica. Videojugador desde chiquitito, si quieres conquistarme, tu dame un buen personaje y una buena historia y me tendrás en la palma de tu mano.

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