Al principio de los 2000, las películas de El Señor de los Anillos se convirtieron en un un fenómeno mundial que hizo que las novelas de J. R. R. Tolkien volvieran a estar en boca de todos. Ya en el siglo XXI, esta segunda fama de las famosas obras hicieron que el universo se expandiera a muchos otros medios, como los videojuegos. Normalmente, las adaptaciones de películas o libros a videojuegos dejan mucho que desear. Sin embargo, El Señor de los Anillos siempre estuvo realmente cuidado y nos ha ofrecido grandes títulos jugables. El juego que nos acompaña hoy en «El Pixel Perdido» es una gran adaptación y un gran juego: El Señor de los Anillos Tácticas.
En el año 2005 llegó a la pequeña portátil de Sony una de las mejores adaptaciones de las películas de Peter Jackson. En El Señor de los Anillos: Tácticas recorreremos todo el periplo de La Comunidad del Anillo a través de la Tierra Media desde la Cima de los Vientos hasta la Puerta Negra.
Una aventura digna de las mejores obras
El juego nos llevará a través de las principales batallas de la Guerra del Anillo y nos permitirá ponernos en la piel de los mayores héroes de la Tierra Media. A nuestros mandos combatirán Aragorn, Légolas, Gimli o los hobbits Frodo, Sam, Merry y Pippin. Además, tendremos tropas de los reinos humanos Rohan y Gondor a nuestra disposición y tampoco podemos olvidar otros personajes que nos ayudarán a lo largo de nuestra aventura, como los ents de Fangorn.
Los combates se desarrollan por turnos, que se dividen en dos fases: una primera de movimiento y otra de combate. En la fase de movimiento decidiremos dónde colocar a nuestras unidades, mientras que en la fase de combate se enfrenten a sus enemigos. Ambas fases ocurren simultáneamente con nuestros enemigos, decidiendo el orden de acción, un parámetro oculto. Normalmente, los juegos tácticos nos permiten controlar a nuestros personaje en «tiempo real», es decir, las acciones que le ordenamos hacer ocurren en ese momento, con el tablero tal y como se encuentra. Pero en este juego se le da una vuelta de tuerca, obligando a predecir los movimientos que realizarán tus rivales.
De este modo, en la fase de movimiento decidiremos dónde colocar a nuestros personajes y en la fase de combate qué acciones realizar, como por ejemplo decidir a quién atacar. Así, todos los personajes se moverán de uno en uno en función de la velocidad de dicho personaje y luego realizarán las acciones. Esto hace que si no medimos bien nuestros movimientos, nuestros ataques no impacten en el enemigo o que nuestros personajes se queden al descubierto ante ataques enemigos. Además, en muchos de los combates tendremos que vigilar nuestro entorno y a enemigos que no se pueden derrotar, como el caso del Balrog de Moria.
Al final de cada fase nuestros personajes suben de nivel, y hace que de vez en cuando debamos farmear para intentar superar ciertos retos que nos ofrece el juego. Pero los combates son tan divertidos que (al menos a mí) no resulta aburrido ni repetitivo.
Por si una aventura no fuera suficiente
Si algo hace bien El Señor de los Anillos es presentar unos enemigos realmente increíbles. Desde el horripilante ojo de Sauron, los implacables nazgul o el infame mago Saruman, no hay enemigo que no sea memorable. Es por ello que este juego presenta un modo novedoso que nos ofrece una campaña de villanos en el que controlaremos a los principales villanos y sus tropas, entre los que están orcos, los uruk-hai o los poderosos nazgul. En este modo podremos ir derrotando a los famosos héroes uno por uno hasta conseguir finalizar con el alzamiento del Señor Oscuro Sauron. A pesar de ser un modo de juego secundario presenta una muy buena cantidad de fases y de héroes, todos.
Un apartado técnico a la altura
El Señor de los Anillos: Tácticas nos lleva de lleno a la Tierra Media que pudimos ver en las películas de Peter Jackson. El juego presenta unos escenarios realmente fieles a los visto en la gran pantalla, con una gran representación tanto del terreno como de las edificaciones. Todos los escenarios son completamente diferenciables, desde los fríos pasadizos de Moria, los campos de Gondor, las praderas de Rohan o los yermos de Mordor, todos y cada uno de ellos tiene una atmósfera distinta y distintiva. Además, en el juego se ven unos diseños de personajes completamente fieles a sus versiones de carne y hueso.
En el apartado sonoro el juego tenía los deberes hechos. La banda sonora de Howard Shore nos acompaña durante todo el juego. Eso hace que las fases sean muy llamativas y emocionantes. Además, todo el juego presenta una gran calidad en los efectos se sonido, lo que hace obligatorio jugarlo con cascos.
Y una de las cosas más importantes, entre fase y fase veremos imágenes de las películas. Podremos disfrutar de los mejores momentos de las adaptaciones de Peter Jackson con una más que decente calidad. Siempre sin olvidar que se trata de una consola portátil y el primer acercamiento a la misma de Sony.
Un juego definitivo del Señor de los Anillos
Hay grandes juegos que todos recordamos basados en la exitosa franquicia. En la memoria de todos está el grandísimo juego de las Dos Torres que salió en 2002. Sin embargo, El Señor de los Anillos: Tácticas salió para una consola menos vendida que otras y fue menos conocido. Sin embargo, me parece imprescindible ser jugado. Cualquier amante de los videojuegos lo disfrutará, pero cualquier amante de El Señor de los Anillos quedará enamorado de esta maravilla.
Cada segundo que pases disfrutando de este juego se bebe amor por la franquicia. Los personajes, las situaciones o los escenarios resultan inmersivos y geniales. Si ya conocías el juego seguro que os acabo de generar la necesidad de rejugarlo. Pero si aún no tenías la suerte de haberlo disfrutarlo, estoy convencido de que os los probaréis, porque realmente merece la pena. Por si queréis ver esta maravilla en movimiento os dejo por aquí el tráiler de esta maravilla:
