Hace unos meses, en La Cuenta Atrás, analizamos una serie de videojuegos clásicos que se volvieron infames por su brutal dificultad, su complejidad, y sus ganas de hacer imposible la vida de sus jugadores.
Esta vez, el foco recae sobre otra de las formas que tiene el videojuego de sacar lo peor de sus jugadores: niveles que son más duros que un trozo de pan caducado. 5 niveles presentes en títulos clásicos que requerían del comodín de “llamar a tu padre/hermano” para lograr avanzar.
Abrochaos los cinturones, que nos vamos…
5. Tutorial (Driver, PlayStation, 1995)
La primera entrada de esta lista es, también, el primer nivel del videojuego al que pertenece. Driver es un clásico de PlayStation desarrollado por Reflections Interactive en 1999, y que fue aclamado como uno de los mejores videojuegos de conducción de su generación.
Sin embargo, lo que hizo verdaderamente infame a este título, es su tutorial. Un nivel que, sobre el papel, debería enseñar a los jugadores a usar distintas maniobras que serán necesarias más adelante. Pero de ahí, a la práctica, el resultado fue muy distinto.
Mucho peor que las prácticas del carné…
El tutorial de Driver coloca al jugador en un aparcamiento subterráneo, exigiendo que una serie de maniobras y derrapes se ejecuten con precisión milimétrica, bajo un límite de tiempo. Una cadena de técnicas tan absurdamente difícil que, antes que enseñar, logró frustrar a multitud de jugadores.
Curiosamente, Martin Edmonson, director de Driver, se basó en una escena de la película The Driver de 1978 para elaborar la lista de movimientos que componen este tutorial. Irónicamente, ningún otro nivel del juego muestra la misma crueldad que este, dejando a los jugadores con una primera impresión más que memorable.
4. Torre de Cristal (Final Fantasy III, NES, 1990)
Aunque los JRPG más clásicos son conocidos por su capacidad para ser desafiantes al máximo, Final Fantasy III no suele ser un título que se deje caer por listas de “videojuegos más difíciles de todos los tiempos”. En cambio, sí que tiene un nivel que fue capaz de cabrear a incluso sus propios creadores.
La Torre de Cristal es el culmen de la aventura de los Guerreros de la Luz, la mazmorra final, el último obstáculo que se interpone entre el jugador y los créditos. La cuestión es que, más que eso, es un muro de hormigón armado, diseñado para hacerle la vida imposible a sus protagonistas.
Misión imposible:
Es, además, la más dura, pues alberga las peleas más difíciles de toda la aventura.
Siendo el hogar de los encuentros con enemigos más duros de toda la aventura, la Torre de Cristal es una prueba de supervivencia. Con 7 plantas de diseño laberíntico, uno podría pensar que no es para tanto. El problema, es que esta zona final del clásico de Square, esconde otras dos mazmorras en su interior.
Por un lado, está la Tierra Prohibida, un área subterránea que, aunque opcional, se vuelve casi obligatoria, al ser el lugar donde los jugadores pueden conseguir las mejores armas y clases del juego. Por otro lado, está el Mundo de la Oscuridad, la verdadera mazmorra final del juego, cargada de jefes durísimos, y de cofres trampa.
Estirar la pata aquí equivale a repetir las últimas 3-4 horas de juego.
3. Nivel 6 (Ghosts ‘n Goblins, Arcade, 1985)
Aunque Ghosts n’ Goblins no se dejó caer por nuestra lista de juegos duros de pelar, su sexto nivel es imposible de pasar por alto. La aventura de Sir Arthur culmina en el ascenso a través de la Torre de Astaroth, que ocupa los niveles 5 y 6 del clásico de Capcom.
Este sexto nivel llega a modo de bofetada para los jugadores que creían que habían tenido bastante con el Nivel 5. Una absoluta paliza jugable que enfrentará al protagonista contra todos los jefes en sucesión. Estos, sumados a la abundante presencia de Firebrand, convierten esta zona en una pesadilla.
¡Te la creíste!
En cambio, el aspecto más cruel de esta zona no son la multitud de desafíos con los que bombardea sus jugadores, sino las jugarretas que esconde si ciertos requisitos no se cumplen al dedillo. Todo el mundo conoce el infame mensaje de “esta habitación es una trampa”, sin embargo, existe uno aún peor.
En lo más alto de la torre, Sir Arthur se batirá en duelo con dos clones de Satán. Derrotarles con cualquier arma que no sea el Escudo, hará aparecer un mensaje aterrador: “este arma es inefectiva, inténtalo de nuevo”. A continuación, el juego enviará al jugador de vuelta al Nivel 5. Crueldad pura y dura.
2. Space Mama’s Crater (Rayman, PlayStation, 1995)
Rayman es uno de esos títulos que no pueden juzgarse por sus apariencias. Detrás de su apartado gráfico adorable, su música alegre y sus coloridos escenarios, se esconde uno de los juegos de plataformas más duros de su generación.
A la, por entonces, mascota de Ubisoft, no le daban ni un respiro. Si bien es complicado escoger uno sólo de sus niveles más duros, Space Mama’s Crater nunca suele faltar en la discusión.
Precisión milimétrica
El tercer y último nivel de Picture City es una combinación de tres largas secciones en las que los jugadores tendrán que maniobrar a Rayman entre infinidad de clavos, pinchos y pozos sin fondo. Todo, sobre plataformas móviles, anillos suspendidos en el aire, o resbaladizas pendientes.
Para rematar, el nivel culmina con la batalla contra Space Mama, uno de los jefes más duros de la aventura, que atacará al protagonista con láseres, lavadoras espaciales y ollas voladoras. Un desafío implacable que, encima, llega justo después de Pencil Pentathlon, otro nivel maratoniano e infame por su absurda dificultad.
a menos que queráis repetir el nivel entero desde el principio.
1. Mojo’s Crunch (X-Men, SEGA Mega Drive, 1993)
Los videojuegos basados en licencias, actualmente, suelen tener la accesibilidad como principal objetivo, con tal de que cualquier persona pueda ponerse a los mandos y disfrutarlos. Sin embargo, en los años noventa, la situación era bastante distinta.
X-Men llegó a la SEGA Mega Drive en 1993, con un título de plataformas protagonizado por el equipo de superhéroes nacidos de los cómics de Marvel. A pesar de no ser un juego conocido por su exigencia, sí lo es por un momento específico de la aventura.
¡Reinicia el ordenador!
Durante el quinto nivel, titulado Mojo’s Crunch, después de acabar con el villano que le da nombre, los jugadores se topan con uno de los puzles más infames de la historia de los videojuegos. El juego pide el reinicio del enorme ordenador de la sala, ¿la solución? No es un botón escondido, no es un comando, ni tampoco es cuestión de arrearle un buen leñazo.
Aquella persona que esté a los mandos tendrá que levantarse del sofá y pulsar el botón ‘Reset’ de la consola. Pero no basta con simplemente pulsar el botón, hay que hacerlo con máxima suavidad, de lo contrario, se reiniciará la consola, acabando con la partida al instante. Un truco que, sin duda, dejó atascados a cientos de jugadores en su momento, en un mundo en el que las guías y, sobre todo, Internet, no estaban al alcance de la mano.
¡Se acabó lo que se daba!
Hasta aquí la aventura de esta semana. Teniendo en cuenta que la dificultad en los videojuegos es un tema en el que abunda la subjetividad, qué menos, que complementar los 5 títulos aquí presentes, con vuestras propias opiniones.
Si sentís que os ha faltado algún título en la lista, o recordáis un caso personal de algún nivel que os hiciera sudar la gota gorda, no dudéis en escribirnos a través de los comentarios. En Punto de Respawn, estaremos deseosos de leeros.
