Hoy os hablaré un poco de mi experiencia con el videojuego Resident Evil Zero: todo lo que supuso la primera vez que jugué y por qué pienso que es de los mejores Resident Evil jamás hechos. ¡Comencemos!
Resident Evil Zero, un soplo de aire fresco
Este título, la primera vez que jugué, me dejó bastante impactado. Ya no sólo por la premisa jugable de llevar a 2 personajes a la vez, sino por el uso tan inteligente de la ausencia de baúles. Sí, sí, lo que leéis, no hay baúles. Los objetos y armas que vamos recogiendo se dejan en el suelo de la habitación en la que estemos (o en uno de los personajes). Con un «pero», y es que hay límite de objetos en cada sala. También cada personaje tiene sus fuerzas y debilidades, con lo que se debe tener cuidado con quién llevamos en determinadas zonas.
AVISO: A partir de aquí puede haber spoilers del juego
Resident Evil Zero es una precuela del primer Resident Evil. Nos narra la experiencia de la novata del equipo Bravo de STARS, Rebecca Chambers, con los zombies y monstruos de Umbrella un día antes de los acontecimientos del «Incidente de la Mansión». Si recordáis, en el primer título, el equipo Alpha los buscaba en el bosque de Raccoon. Pues aquí sabemos lo que les pasó y cómo se estrellaron.
El juego no nos da a elegir un personaje, sino que empezamos con Rebecca y luego, un poco más tarde, nos encontramos con el teniente Billy Coen en un tren propiedad de Umbrella Corp. El Ecliptic Express. Este se nos unirá tras una tensa conversación y procederá a ayudarnos durante el resto del juego (salvo en un momento puntual de la historia).
La premisa es escapar del tren infestado de Umbrella y encontrar al resto del equipo Bravo mientras Rebecca descubre la terrible verdad detrás de la compañía y del origen del virus T en diferentes localizaciones, incluyendo una fábrica y el Centro de Formación de Umbrella en las montañas Arklays.
La primera vez que entras al tren notas la tensión a flor de piel. Capcom en Resident Evil siempre ha sabido crear el ambiente perfecto para darte el máximo terror y suspense.
Aquí no hay un plano del «primer zombie». Pero aun así, hay momentos de máxima tensión.
Los personajes y su desarrollo
Aquí encontraremos a Albert Wesker otra vez y al creador del virus G, William Birkin. Pero su aparición será meramente anecdótica y nos sirve para enlazar un poco con el papel de Wesker en el primer Resident. Hay algunos más, pero sus apariciones son muy cortas y solo sirven para darnos más tensión. Los importantes son Rebecca y Billy, los cuales formarán el grueso de la trama, y el doctor James Marcus, el creador del virus-T, cuyo papel será el de jefe final y nos contará en ciertas partes del juego por qué hizo lo que hizo.
Aquí se nota más que nunca la juventud e inexperiencia de Rebecca Chambers, que se licenció a los 18 años en bioquímica y entró en el cuerpo STARS muy joven. Por tanto, es el personaje más «débil» en cuanto a resistencia de daño, pero, como médica de campo, posee un maletín que nos será útil para hacer mezclas de hierbas, así como para la resolución de ciertos puzzles en el juego. Billy Coen, por otra parte, es el que más daño resiste y el que más fuerza tiene, por tanto nos servirá para mover y usar ciertos mecanismos a lo largo del juego. Su historia es bastante triste, ya que nos cuenta que fue acusado de insubordinación y condenado a muerte.
Entre ambos protagonistas sentí una conexión especial del tipo hermano mayor y hermana menor. Empiezan desconfiando el uno del otro (por la situación «criminal» de Billy), pero al final la cooperación para sobrevivir les hace quererse y respetarse mutuamente, hasta el punto de que al final Rebecca decide dejarlo ir porque sabe que es inocente.
Para finalizar
Resident Evil Zero es un gran juego, de los mejores títulos que he jugado de la franquicia, a pesar de que a priori pueda parecer el más complicado al no haber baúles y tener que lidiar con dos personajes a la vez. Me parece un error no jugarlo por eso, ya que os aseguro que merece muchísimo la pena, dado que nos cuentan muchas cosas sobre el origen de Umbrella y del virus. Resulta un fantástico conector con los acontecimientos del primer Resident y nos da dos localizaciones muy interesantes, como son el Centro de Formación y el tren. Además, también hay nuevos enemigos como los Eliminator (monos infectados con el virus), las sanguijuelas, los Plague Crawler (insectos muy peligrosos y grandes), el Stinger (un escorpión gigante) y Centurión (una escolopendra con muy malas pulgas). Hay un par más, pero dejo que los descubráis vosotros mismos si jugáis.
En conclusión, me parece que es uno de los mejores Resident Evil; diría que está en mi top 5. Ya no sólo por su fórmula jugable diferente al resto, sino por dar solidez a la historia de la franquicia y por ser el nexo de unión de mi Resident favorito (el primero).
Espero que os haya gustado y que no se os haya hecho muy largo. Si aún no habéis probado esta maravilla de juego, espero que os animéis a hacerlo. Gracias por leerme y un abrazo enorme.
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