Deliver At All Costs: Su pedido está en reparto

¿Alguna vez has oído que el transporte y la logística están en auge? Puede que nuestro protagonista de hoy haya tenido la suerte de hacerse hueco en su mundo, o tal vez sería más correcto referirse a ello como “desgracia”. Deliver at all Costs te hará llevar a su destino entregas que jamás habrías imaginado, y es que es mediante su absurdez y sarcástico tratamiento donde te engancha, te empaqueta y te entrega a la locura sobre ruedas. ¿Qué podemos esperar de este título tan inusual? Sigue leyendo, ¡que te lo contamos!

Historia: Explotemos todo ese potencial

Comienza nuestra aventura a finales de los años 50, concretamente en 1959, calzando las botas de un joven inventor mucho más capaz de lo que reflejará la escena en la que se nos presenta: durmiendo de cualquier forma en su cama y despertándose con bastante mal humor. Winston Green, sin embargo, es todo un prodigio, de origen humilde y con grandes ambiciones… pero sin trabajo con el que llegar a fin de mes.

Su carrera como inventor, como mencionábamos, no marcha precisamente bien: recibe constantes negativas a sus propuestas, lo que entorpece su camino y dificulta que logre salir adelante, pese a su persistencia. No obstante, su vida está a punto de dar un giro de 180 grados. Una mañana cualquiera, escucha en la radio una oferta de empleo y, a partir de ese momento, todo cambia. No solo comenzará a trabajar en “Tu Entrega” —una empresa de reparto la mar de… «versátil»—, sino que también se embarcará en una serie de misterios de los que ya ni tú ni él podréis escapar.

A partir de ese momento, Winston se ganará el pan yendo y viniendo por toda la ciudad, cargando en su furgoneta un sinfín de mercancías tan ocurrentes y dispares que te mantendrán enganchado a la pantalla. ¿Qué será lo siguiente? Solo hay un modo de averiguarlo: jugando. Y es así como esta divertida entrega (y nunca mejor dicho), junto con los misterios que su trama esconde, no te permitirán dejar de avanzar.

Deliver At All Costs mezcla un tono serio, de historia clásica de la década de los 50, con un humor absurdo en el que no puedes dar nada por sentado, y es esa combinación tan extraña como original y divertida la que se convertirá en uno de los elementos que dotan al título de más personalidad. En cuanto a la trama más profunda, al igual que ocurre con ciertas escenas que dan más fondo a los personajes, se relatarán en formato cómic, manteniendo esa estética de los cincuenta tan nostálgica y especial.

Jugabilidad: ¡Eficiencia máxima! Más… o menos

La mayor parte de la acción de este alocado título ocurrirá al volante. El juego nos permite jugar por libre para explorar la ciudad cuando nos apetezca, siempre que no estemos en mitad de una entrega. Y si bien no hay tanto que ver (aunque haya coleccionables y algunos elementos que visitar), es de agradecer tener la oportunidad de conducir sin prisa ni objetivos fijos.

Su pedido está en proceso de entrega

Cuando activemos la radio, dará comienzo la siguiente misión. Nos harán ir en primer lugar o a la empresa o bien al punto de recogida, para luego transportar la mercancía hasta su destino. En ocasiones, nos pedirán realizar alguna tarea antes de entregar, como alguna que otra artimaña que haga que la mercancía adquiera un mejor aspecto de cara al cliente.

Una de las sensaciones más divertidas que provoca Deliver At All Costs es la curiosidad que su propio modo de juego genera. Siempre querrás ver con qué elemento te sorprenderá el siguiente trabajo (y creedme cuando os digo que siempre lo consigue).

No todos los repartos son iguales, ni mucho menos

Cada tipo de mercancía que transportemos influirá en cómo se desarrolla la entrega. Para no desvelaros demasiado, os pondremos de ejemplo dos de los primeros trabajos: la entrega de globos y la de un enorme pez. En la primera, nuestro coche prácticamente volará en cada bache, mientras que con el segundo tendremos que ir buscando comida para calmar a la bestia, o se sacudirá, dificultando la conducción e incluso llegando a escapar del vehículo.

La variedad que esto ofrece evita que una jugabilidad en principio repetitiva (recoger paquete, entregar paquete) se sienta diferente en cada misión. Y no solo eso, sino que además te anima a continuar para descubrir qué más ideas locas han implementado sus creadores en el juego.

Explorando la ciudad

Conducir correctamente en Deliver At All Costs es una opción, pero os aseguramos que ni es tan fácil llevarlo siempre a cabo ni tan divertido como no hacerlo. Al juego le importa un bledo si atropellas a gente o no, o si te llevas una u ochenta farolas por delante (tal vez a algún lugareño sí, pero eso no es nuestro problema). Lo importante es la mercancía, y de eso no cabe ninguna duda.

Explorando el mapa, nos encontraremos con ciertos encuentros o tareas secundarias que dan frescor a una jugabilidad que, en esencia, es un tanto repetitiva. Consisten en pequeños puzles, por lo general, y al completarlas, podremos obtener planos y mejoras para nuestro vehículo de reparto. Por supuesto, necesitaremos visitar nuestro taller, donde incorporaremos añadidos al coche para hacer nuestra experiencia más pulida, llevadera y, cómo no, divertida. Con los conocimientos necesarios (los planos) y el material que las mejoras requieran, adquiriremos nuevas formas de poner la ciudad patas arriba (y la mercancía también, para qué nos vamos a engañar).

Apartado técnico

En Deliver At All Costs, el mapa se divide en zonas. Esto no supondría ningún problema, de no ser porque tendremos que lidiar con una pantalla de carga cada vez que cambiemos de una a otra. No son excesivamente largas, pero se sienten como una piedra en el camino. Afortunadamente, hemos podido disfrutar de Deliver At All Costs sin errores tales como bugs o caídas de FPS. Los controles, por otro lado, se hacen cómodos e incluso se pueden elegir dos configuraciones diferentes a la hora de conducir.

Apartado gráfico y artístico

Deliver At All Costs cuenta con unos gráficos sencillos, con colores de muchas tonalidades, sí, pero siempre con ese «filtro» apagado o vintage que recuerda a la época en la que se ha basado. La ambientación es francamente buena, tanto en este aspecto como en los escenarios que atravesamos durante nuestra aventura. Tiene un encanto palpable, y es algo que nos ha gustado bastante.

Los modelados de los personajes carecen de detalles finos, así como los el del resto de elementos. Lejos de ser un punto a criticar, creemos que, por el estilo que gasta, no necesita más. Se juega en vista isométrica y no tenemos planos detalle, por lo que no hemos echado en falta una mayor resolución.

Apartado sonoro

La música nos transporta directamente a los años 50. Tal y como lo hace con su apartado visual, Deliver At All Costs ha sabido empaparse de la cultura y la estética de la época. Con melodías variadas y al ritmo de jazz o incluso rock suave, iremos adentrándonos en su mundo sin darnos cuenta. El doblaje es muy real, con unas interpretaciones que dotan a los personajes de alma, lo cual ayuda en ese proceso tan especial de conocerlos y encariñarnos incluso con ellos. Los efectos sonoros, sin embargo, no destacan especialmente; pasan desapercibidos en el buen sentido, ya que resultan naturales y se integran como es debido en el título.

Edición física de Deliver At All Costs

Si te gusta llenar tus estanterías con tus juegos favoritos, estás de buena suerte, porque Deliver At All Costs se encuentra disponible en formato físico tanto para PlayStation 5 como para Xbox Series X|S. Se trata de una edición sencilla, pero también bastante económica. Una oportunidad perfecta para hacer crecer tu preciada colección.

Conclusión

Deliver At All Costs es un título que se aleja de lo que estamos acostumbrados a ver. Su jugabilidad es sencilla, con una base repetitiva, pero que sabe variar sus mecánicas en cada nueva misión, lo cual hace que no perdamos el interés o nos aburramos de ella. La narrativa inicialmente parece no tener demasiado peso, pero a medida que avancemos nos daremos cuenta de nuestro error. Si quieres probar un juego diferente, divertido y que te haga reír, sin ninguna duda esta es una muy buena opción.

Lo mejor

• Una narrativa que sorprende según avanzas y que engancha
• Originalidad en su propuesta alocada e irreverente
• Un humor muy propio, con personalidad

Lo peor

• Unas mecánicas que resultan repetitivas a largo plazo
• Molestas pantallas de carga entre zonas

Nuestra valoración de Deliver At All Costs